Escrito antes de que la Argentina se inscribiera en el proyecto globalizador, este ensayo anticipa el tema, recordando que no hay salto posible al mundo global sin una conciencia histórica nacional y sin una percepción de la Nación como sujeto histórico con un destino propio. En dieciocho capítulos, explora aspectos de la identidad nacional, define los intérpretes políticos de la cultura argentina y plantea los problemas que enfrentarán a la Argentina profunda con la Argentina internacionalizada.